martes, 25 de octubre de 2011

AMISTAD

El pasado domingo nos visitaron Pedro Tabernero y Alfredo, se quedaron sorprendidos de la librería y del pueblo aunque no comieron muy bien, una constante que empieza a ser habitual ultimamente.
Alfredo me dedicó su libro "EL RASTRO MADRID", una dedicatoria entrañable, como es él por lo
menos eso es lo que me pareció, por lo poco que nos conocimos y la buena química que surgió del encuentro. Le recordé los libros y colaboraciones suyas en distintos medios. Alfredo, simplemente como es conocido en el mundo de la ilustración es uno de los grandes cronistas urbanos, esta es una pequeña semblanza sobre el personaje y su obra;
Alfredo es el dibujante por excelencia a quien hay que recurrir cada vez que se hable de la ilustración urbana. Nadie como él ha plasmado gráficamente la fisonomía de las grandes ciudades. Es todo un clásico.
Alfredo es un grandón, como dirían en su tierra. Y también es grandón de complexión física. O sea que Alfredo, a quien su madre en la cuenca minera llamaba Alfredín, es un tipo fenomenal y además es como un niño grande. Quiso ser futbolista, maquinista de RENFE, conductor de camión y fraile dominico. Alfredo González, Alfredo a secas como se le conoce en toda España y parte del extranjero, trabaja a destajo y se encuentra en su mejor momento.
Alfredo desarrolla tanta actividad laboral que apenas la puede abarcar. Y todo ello pasados los 75 y sin presumir, porque él es un profesional y eso se nota a la legua. En ciertos sectores laborales algunos van desgranando eso de yo soy un profesional para hacerse respetar pero Alfredo no lo dice, lo demuestra. Como debe ser.
Sin dejar el mundo del diseño de gran formato, que es lo suyo, Alfredo finalizó la ilustración de varios libros, Seis barbas de besugo y otros caprichos, de Ramón Gómez de la Serna; El Rey Lear (Cuento basado en la obra de Shakespeare), de Charles Lamb; y Poeta en Nueva York, de Federico García Lorca, en una edición conmemorativa patrocinada por la Universidad Columbia de Nueva York. ALF, como le llaman algunos en abreviatura anglosajona, tiene otros proyectos, Gente principal, con caricaturas de reyes y políticos, y unas Memorias ilustradas.
ALF también fabricó en 2008 una valla publicitaria en torno a la finca donde se alzaba el edificio Windsor con unos trampantojos de casi mil metros cuadrados en los que se veía a viandantes deambulando por Madrid con bolsas del corte inglés. La zona de Azca albergó durante meses los dibujos alfredianos, con sus colores comedidos y sus característicos espacios en blanco. Y eso, sin dejar de colaborar en El Mundo, después de haberlo hecho en El País, Diario 16, Cambio 16, El Papus, El Jueves, La Codorniz y El Independiente.
Alfredo es todo un clásico en la plasmación gráfica de espacios urbanos, es el pintor por antonomasia de las ciudades. Y la ciudad donde vive y trabaja desde hace años, Madrid, se lo agradecerá algún día. Desde 1958, en que se salió de los curas, Alfredo no ha dejado de dibujar Madrid con sus avenidas, plazas, plazuelas, edificios y rincones más emblemáticos. Alfredo ha venido siendo el cronista gráfico que más favorecida ha sacado a Madrid. Dispone en su estudio de 500 cuadros sobre la capital que espera exponer algún día.
  alfredoilustrador.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario